Israel ha violado repetidamente el alto el fuego acordado en Líbano. Un oficial senior de Hamas, Muhammad Shaheen, fue eliminado en un ataque con dron a un vehículo cerca de Sidón el lunes.
El ataque en el sur del Líbano fue llevado a cabo en una operación conjunta del IDF y el Shin Bet (Agencia de Seguridad de Israel) y guiado por información de inteligencia de la Dirección de Inteligencia y el Comando del Norte.
Shaheen era el jefe de operaciones de Hamas en Líbano. En su rol, intentaba planificar operaciones terroristas contra ciudadanos israelíes, ya fuera dentro del territorio israelí o durante viajes internacionales.
Israel elimina a Muhammad Shaheen mediante un ataque selectivo con drones. https://t.co/ioFypiZRGZ pic.twitter.com/5EmdPjQfq7
— opszone.org (@OpsZoneOrg) February 18, 2025
Incidentes en el Sur de Líbano
En otra parte del sur del país, las fuerzas israelíes abrieron fuego contra civiles que intentaban regresar a sus hogares en la localidad de Hula. Este ataque resultó en la muerte de una mujer y dejó cinco personas heridas. El Ministerio de Defensa israelí justificó la acción argumentando que los civiles «suponían un peligro para el ejército».
Retraso en la Retirada de Tropas
Israel ha decidido mantener su presencia militar en cinco ubicaciones estratégicas en el sur de Líbano, extendiendo su estancia más allá del plazo de retirada acordado en la tregua con Hezbollah, que se suponía debería haber culminado el 18 de febrero de 2025. La justificación de Israel para este retraso se basa en la percepción de que el ejército libanés no ha desplegado adecuadamente en las áreas requeridas para garantizar que Hezbollah no vuelva a establecerse en el sur del país, lo cual era una condición clave en el acuerdo de alto el fuego. Esta decisión ha generado fricciones y preocupación en Líbano, que ha expresado su oposición a cualquier demora adicional, considerando la presencia de las tropas israelíes como una violación del acuerdo de cese al fuego. Tal y como puede observarse en el mapa, aún hay presencia del IDF en las zonas marcadas en ROJO.
La prolongación de la presencia militar israelí en el Líbano ha sido criticada por el gobierno libanés y por Hezbollah, quienes han advertido que cualquier retraso en la retirada podría ser interpretado como una nueva ocupación y una amenaza a la soberanía libanesa. Además, ha habido informes de enfrentamientos esporádicos y ataques aéreos selectivos por parte de Israel en el sur de Líbano, lo que ha llevado a cuestionamientos sobre el respeto al alto el fuego. La comunidad internacional, incluidos Estados Unidos y Francia, ha estado involucrada en la supervisión del acuerdo, promoviendo negociaciones adicionales para asegurar que ambas partes cumplan con los términos establecidos y evitar una escalada de la tensión en una región ya volátil.
Presiones y Negociaciones Internacionales
Los medios de comunicación estadounidenses han reportado que Israel está solicitando permiso a Estados Unidos para posponer aún más su retirada, específicamente diez días adicionales, y además desea mantener el control sobre varias colinas estratégicas en Líbano para proteger sus asentamientos.
El enviado especial adjunto de Estados Unidos para Oriente Medio, Morgan Ortagus, ha declarado el compromiso de Washington con el acuerdo de retirada del 18 de febrero. No obstante, considerando el apoyo de la administración de Donald Trump hacia Israel, existe la posibilidad de que se considere una extensión adicional del plazo.
En Resumen
Este escenario refleja la complejidad y fragilidad de los acuerdos de paz en la región, donde cada acción puede tener repercusiones significativas en las relaciones internacionales y en la vida cotidiana de los ciudadanos de ambos países.